lunes, 31 de enero de 2011

Ola de Cambio


En las últimas tres semanas hemos visto como se han escenificado diversos tipos de síntomas de malestar social en todas partes del mundo. Todos relacionados a escándalos o descontento de la población con sus gobernantes. Algunos por desenfreno sexual de parte de los mismos que intentan trazarle sendas morales a la población (Irlanda del Norte e Italia), otros por el nada sorprendente escape de la presión social a la que han sido sometidos por años o décadas (Albania, Pakistán, Líbano), algunos otros por la inutilidad del sistema para funcionar (Haiti, Costa de Marfil, Republica Central Africana, Sudán). Disturbios y/o acciones violentas en Yemén, Rusia, Omán, Jordania, Siria, etc. Dos casos han llamado la atención del mundo, dada la vehemencia mostrada por los que protestan: Egipto y Túnez.


Túnez recientemente pudo librarse del yugo del dictador Ben Alí, quien, como todo dictador de pacotilla, mantenía el país como su finca personal. Todo hasta el día en el que el pueblo simplemente se hartó.


El final de la tiranía
Photo: Totallycoolpix.com



Del mismo modo, el pueblo egipcio, le dijo a Hosni Mubarak: ¡BASTA YA! Con casi 30 años en el poder, asumido tras la masacre donde fue asesinado su predecesor Anwar El Sadat tras una fatwa declarando su muerte, Mubarak ha ido perdiendo popularidad con los años. El pueblo exige cambio y el no lo quiere dar. Resultado:


No es StarCraft, sino la vida real
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Pueblo contra gobierno. Militares contra civiles. Libertad contra represión. El gobierno egipcio decide contra-atacar no solo con el brazo armado, sino eliminando las comunicaciones. Desconectaron el Internet a nivel nacional (algo nunca antes visto, y que debería de servirnos de advertencia), retiraron acreditaciones de prensa a Al-Jazeera, ordenan toque de queda general obligatorio. Nada de esto pudo domar la decisión del pueblo de un cambio. Teniendo como principal representante a Mohammed el-Baradei, un erudito y diplomático que cuenta con mucho aprecio entre la población, hemos visto como el pueblo de Egipto ha resistido los embates de la coacción y se mantiene firme en sus demandas de que Mubarak abandone el poder. Mucho mas después de las desesperadas, pero no menos descabelladas, decisiones que ha venido tomando últimamente: disolución absoluta del gabinete gubernamental, nombramiento de todo un nuevo gabinete tres días después, nombramiento de nuevos Primeros Ministros y Vice-Presidentes.


El pueblo firme
Photo: Totallycoolpix.com

De todo esto hay dos elementos curiosos:


  1. La mayoría de los países mencionados son parte del Mundo Árabe, así que esperemos a ver al brazo fundamentalista del Islam tratar de pescar en rió revuelto en estos países de alineación secular.
  2. Varios, sino todos, estos disturbios vienen a consecuencia de los documentos liberados en Diciembre por WikiLeaks, la famosa organización pro-transparencia liderada por Julian Assange.
Es claro que estamos ante un nuevo statu quo donde los pueblos van a comenzar a exigir mas y mas de sus gobernantes (o al menos eso esperamos) y esto, aunque ha comenzado por los lugares de mas represión,  es algo que se esparce. No en vano, China ha comenzado a censurar la información referente al caso egipcio. Obviamente por temor a que los vientos de resistencia y cambio aticen las brasas que proliferan dentro de su territorio.

¿Qué significa esto para nosotros?

En el próximo articulo hablaremos de ello.

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