miércoles, 25 de julio de 2012

The Dark Knight Rises (2012)

Queda claro que dentro de esta película hay otra película que pudo ser mejor si se hubieran alineado las estrellas. Tiene todos los elementos para haber sido una obra maestra, pero de algún modo resbaló antes de alcanzar la grandeza.

Con un ritmo trepidante, pero a la vez con una longitud inmensa, el filme se siente apurado. Como un pianista que toca las notas porque están en la partitura y quiere regresar temprano a casa. Se siente un poco laxa la dirección de Christopher Nolan. Prueba de esto es un desatinado cambio de horario durante una escena tras la entrada y salida en un túnel de Ciudad Gótica (entran al túnel de día, salen de noche, pero solo pasan unos minutos). Va en linea ascendente desde que comienza hasta un poco más de la mitad, luego se torna nebulosa durante alrededor de una hora, para entonces ascender a lo más alto durante el final/epílogo.



En materia de libreto, se siente torpe a veces. Algunos personajes superfluos, que no aportaron mucho a la trama. Otros que solo sirvieron para atestar el reparto, quizás innecesariamente y a pesar de resultar en uno de los giros más impactantes del filme. Falta de desarrollo apropiado de algunos puntos narrativos, se aboca más a la espectacularidad de las escenas y unas preciosas tomas aéreas que habitan la pantalla durante toda la película. Sin duda la desaparición física de Heath Ledger fulminó los planes de Nolan y obtuvimos una historia que quizás no era precisamente la que se nos quería contar.


No alcanza el grado de sofisticación y solidez de su antecesora, The Dark Knight, laudada por muchos como la mejor película basada en cómics de todos los tiempos. Y resulta irónico, pues en las dos anteriores, Nolan se había decantado por atar el personaje y su entorno al realismo tanto como se pudiese, pero esta tercera entrega resulta ser la que más se sumergió en las idiosincracias del género de superhéroes. Quizás allí residió el fallo. Aunque la pericia técnica del director es evidente y estamos frente a una excitante y muy buena película, solo una que se quedó corta en llegar a la perfección.

La musicalización en ocasiones refleja el ritmo acelerado y sin descanso que menciono arriba, pero es increíblemente ingenioso como en una escena clave, en el punto crucial a mitad de la película, la música desaparece completamente y solo podemos escuchar los sonidos ambientales. Esto vuelve una secuencia de por si brutal, en algo visceral. Por lo demás, todo tuvo un tinte muy épico, con el tema central reproduciéndose en momentos importantes.


Las actuaciones fueron el punto más alto de la película, con un Tom Hardy haciendo de Bane uno de los villanos más dominantes de los últimos tiempos. No es un asunto tanto de robarse escenas, aunque se las roba, sino de la presencia que transmitió en todas sus apariciones. Sus gestos, lenguaje corporal y esa controversial, pero muy efectiva voz. Imponente. Es alguien que cada vez que sale, está en absoluto control de la película y del público.


Anne Hathaway pudo superar, con creces, la apatía inicial que muchas personas sintieron, pues no se la imaginaban como una femme fatale. Christian Bale tuvo en esta su más importante actuación de toda la trilogía. Realmente vendió la idea del justiciero torturado que se sumerge en lo más profundo de la oscuridad. Michael Caine, siempre incisivo como Alfred, fue clave en la parte emotiva de la cinta. El resto del reparto (Oldman, Freeman, etc) estuvo correcto, salvo quizás Marion Cotillard, quien para mi fue el punto débil del filme, pero resulta más una muestra de la debilidad de Nolan con los personajes femeninos que culpa de la hermosa francesa.


Si quiero recalcar en especial la actuación de Joseph Gordon-Levitt. Llevó sin duda el estandarte de ser el elemento humano en la película y donde se vio representada la audiencia. Vimos como su importancia  ascendía mientras corría el tiempo, todo hasta llegar a un final que nos dejó con la boca abierta. Ciertamente uno de los más grandes aciertos de Nolan y su equipo de libretistas.


Una de las cosas más interesante de Nolan es como utiliza su propia filmografía (no solo de Batman) como parte de una meta-ficción donde cada una de ellas va presagiando algo que pasará en las que siguen. Las referencias a elementos de Batman Begins, The Prestige, The Dark Knight e Inception, son claras y muy astutas. Ser más que un hombre, ser un símbolo. Todo truco mágico tiene tres etapas y el tercero es el más difícil. La inserción de una idea en la mente de una persona. Entre otros.


Cierro diciendo que, como filme en si mismo no es el más solido, sin embargo, como cierre a una trilogía que nos ha visto esperar en ascuas desde el 2005 hasta la fecha cada capítulo de la misma, resulta mucho más que efectiva. Les aseguro que no saldrán decepcionados y que vale ver toda la película si acaso por los minutos finales donde todo puede pasar. Y pasa.


¿Conclusión?


El Caballero Oscuro tropieza, pero definitivamente asciende. 



2 comentarios:

  1. Solo te falto resaltar los diálogos, sin dudas no es The Dar Knight pero como fina simplemente magnífico, además de que no.me equivoqué.

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  2. Te lo dije una vez, y lo repito... El guion es lo peor que tiene esta pelicula. Es demasiado cliche para ser un guion de Nolan. Y honestamente, a veces se siente hasta bobo. Sabemos que Nolan no estaba en hacer otra pelicula de Batman, pero vio las posibilidades de congraciarse con los estudios trayendo otro super-exito a casa. Cuantos directores pueden decir que tienen 2 peliculas que sobrepasan el billon? Lucas, Cameron... Rayos, ni siquiera Spielberg. Creo. Y proximamente Josh Whedon... Mi punto es que, ahora SI. Ahora si le van decir que SI a Nolan. No importa el proyecto (vayan cogiendo con Superman) Nolan puede aparecerse con el proyecto mas descabellado... Que se yo... un reboot a Green Lantern... y le van a decir que si! Para cerrar... TDKR sucks!! (The whole thing down!)

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